Las palabras y la bendición del Papa Francisco, la oración por la paz de Monseñor Domenico Sorrentino y un evento deportivo que reunió en la salida de Asís a cientos de corredores, profesionales y aficionados, que atravesaron las Tierras de San Francisco hasta la espectacular meta frente a la Basílica de Santa Maria degli Angeli.
El primer Maratón de San Francesco, a pesar del tiempo adverso hasta una hora antes de la salida, fue un éxito en todos los aspectos. Empecemos por el deportivo: más de 2.000 inscritos en el Maratón, los 10K y la marcha Vieni con me, que vio el triunfo, para los 42K, del ultramaratoniano Lorenzo Lotti (Asd Berunners) que terminó en 2 horas, 36 minutos y 54 segundos iluminado por un final espectacular a lo largo de la explanada de la Basílica de S. M. Degli Angeli.
Detrás de él Federico Furiani (TX Fitness) en la línea de meta tras 2 horas, 39 minutos y 6 segundos y el ucraniano Evgenii Glyva (Asd Filippide/Avis C.Lago) que terminó en 2 horas, 47 minutos y 8 segundos. Entre las mujeres primeras de la general Federica Moroni (G.S. Gabbi) en la línea de meta en 2 horas 55 minutos 35 segundos seguido de Paola Salvatori (Us. Roma 83) en 2 horas 57 minutos 30 segundos y Cristina Mercuri (Atletica Winner Foligno) llegó a la meta después de 3 horas, 12 minutos y 34 segundos.
Siguieron más de 700 finishers que el domingo por la mañana, junto con los cientos de corredores que corrieron los 10K, se dieron cita en Asís a pesar de la lluvia caída en las primeras horas del día. Un mal tiempo que se disipó media hora antes de la salida, transformándose en un sol espléndido que acompañó a los maratonianos a lo largo del recorrido que unía la Ciudad Seráfica con Spello y Cannara, hasta Santa Maria degli Angeli.
SFM23, como ya se ha mencionado, también fue un gran momento de espiritualidad. Papa Francisco envió su saludo deseando que el acontecimiento sea "una ocasión providencial para promover los valores humanos, cristianos y franciscanos que pueden dar al deporte un alma y un impulso ideal", escribió el Pontífice antes de dar su bendición apostólica y recordar que la cooperación entre los pueblos es necesaria "para promover la acogida y la solidaridad".
El mensaje fue leído por el obispo de la diócesis de Asís, Gualdo Tadino y Nocera Umbra, monseñor Domenico Sorrentino, quien a continuación lanzó su oración por la paz desde la plaza de la Basílica Inferior -durante la bendición de los maratonianos- con el pensamiento puesto en Tierra Santa. Siguiendo con el tema de la solidaridad y la caridad, en la salida del Maratón de San Francisco, tal y como anunciaron los organizadores, a saber, Life Running Assisi y Kolorado, se recogió ropa donada por los corredores, que se distribuirá a personas en situación de fragilidad.
Al mismo tiempo, parte de la recaudación de las inscripciones se donará a varias organizaciones benéficas que trabajan en la zona y a la Fundación Dispensario Pediátrico Santa Marta de la Ciudad del Vaticano.
